Binner: La apertura del Diálogo Político "es un Síntoma del Crecimiento de la Democracia"

El gobernador destacó que es una oportunidad para encontrar soluciones al problema de la pobreza y la exclusión. "La verdad no es una sola, hay que consolidar propuestas que seguramente suman muchas verdades", afirmó.

El gobernador Hermes Binner dijo que la apertura del diálogo político anunciado por el gobierno nacional "es un punto de partida para encontrar soluciones", fundamentalmente al problema de la pobreza y de la exclusión social.

Binner señaló que la apertura del diálogo es "un síntoma del crecimiento de la democracia" y constituye un "espacio importantísimo para poder conversar, intercambiar ideas, buscar siempre soluciones. La verdad no es una sola, hay que consolidar propuestas que seguramente suman muchas verdades", aseguró.

En declaraciones periodísticas formuladas ayer en la capital provincial, tras participar del homenaje al ex intendente de la ciudad de Santa Fe Enrique Muttis con motivo de conmemorarse el 18º aniversario de su fallecimiento (ver aparte), el gobernador destacó también el manejo de las autoridades sanitarias respecto de la pandemia de gripe A.

“En Santa Fe se ha actuado correctamente”, aseguró el gobernador, y destacó que “desde el punto de vista de la atención tenemos todos los médicos entrenados, tenemos la antiviral para atender las demandas de Santa Fe y tenemos también el diagnóstico en la propia provincia”.

A continuación se reproduce parte del diálogo mantenido por el gobernador con los periodistas:

-¿Que grado de credibilidad le da a la apertura al diálogo que ha expresado la Presidenta de la Nación?

“Depende del gobierno. Creo que hay una necesidad de diálogo muy grande en el país y es un espacio importantísimo para poder conversar, intercambiar ideas, buscar siempre soluciones. La verdad no es una sola, hay que consolidar propuestas que seguramente suman muchas verdades”.


-Algunos lo toman como un síntoma de debilidad.

“Yo lo veo como un síntoma de crecimiento de la democracia, más allá de las causas. Lo importante es que comencemos a hablar de nosotros y que hablemos sinceramente de lo que nos ocurre todos los días y que en un país generoso como el que vivimos indudablemente tiene solución”.



-¿Qué tema tiene que estar en la mesa de diálogo?

“Por lo menos los más importantes. Hay un tema que es el de la exclusión social. Siempre creemos que la solución de la inseguridad tiene como único camino la mayor represión, mayor fuerza de seguridad; esto obviamente que hay que tenerlo y cada vez más perfeccionado, pero hay una serie de valores que no ayudan a construir una sociedad. En este sentido, las palabras de monseñor (Jorge) Casaretto han sido muy claras: abordar el tema de la pobreza como uno de los temas centrales de la ciudadanía argentina. Todo en una realidad donde hay una economía que tiene, a partir de lo natural, de los productos primarios y de los productos elaborados, en la alimentación una sus grandes fortalezas”.



-¿Ha tenido algo que ver el resultado de la elección en esta apertura al diálogo?

“Mire, si tuvo que ver, en buena hora. Lo importante es el resultado, tener que transitar un tiempo donde nos escuchemos. Creo que este es el punto de partida de encontrar soluciones”.



- ¿La pobreza y la exclusión es la gran cuenta pendiente que tiene la democracia argentina?

“Si, además es una cuenta que va creciendo. Acá no crece solamente la deuda externa, crece nuestra deuda hacia la sociedad y no sabemos cómo resolver ni ética ni moralmente esta cuestión de tener una producción de alimentos que pueden darle de comer a 100 millones de habitantes y muchos argentinos que no tienen qué comer. Esto hay que corregirlo”.

-¿Cómo se refleja esto en nuestra provincia?

“En los hechos, en la gente que pide de comer y cada día hay más pedidos en Promoción Social, en Desarrollo Social. Realmente es una situación que, quienes no la hemos pasado, no tenemos dimensión de la profundidad de la degradación humana de decir: «Por favor, déme algo para comer»”.

GRIPE A

-La situación de la gripe A es preocupante en la provincia ¿En Santa Fe se sinceran los números y por eso son más abultados que en otros lugares?

“Porque nosotros tenemos en Santa Fe el propio sistema (de análisis) para registrar el diagnóstico, no hace falta enviarlo al (instituto) Malbrán (como lo hacen el resto de las provincias), donde los resultados demoran tres semanas. Y en tres semanas ya está hecho el certificado de defunción, ya está inhumado y muchas veces (las causas de la muerte) se confunden con otras enfermedades. Hay diagnósticos que no se cambian; como es lógico, nadie pretende revisar los certificados de defunción, pero realmente es un factor que distorsiona la realidad esto de tener tres semanas para tener el diagnóstico”.



-¿Esta distorsión perjudica a la provincia, porque aparece primera en número de muertes y personas afectadas?

“Hoy tenemos todos los elementos para que no tenga el impacto que pudiera tener en la provincia de Santa Fe. Tenemos el total apoyo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) hacia lo que se está haciendo aquí; tenemos tres técnicos que vienen de la Organización Mundial de la Salud (OMS): uno de Guatemala, otro de México y otro de Perú, que van a llegar para ver el comportamiento de la enfermedad, que realmente es muy extraña. Como sabemos, comenzó en Estados Unidos, en la frontera con México, se transmitió luego, no del cerdo al cerdo, sino del cerdo al humano, y lo más notable es que como gripe se desarrolló en el verano”.



-¿Lo peor ya pasó o aún queda llegar al pico?

“Esto no lo podemos decir. Lo que podemos decir es que es necesario establecer normas de cuidado y de prevención que, por otra parte, están en todos los diarios y es lo más conveniente hacer en estos casos. Desde el punto de vista de la atención tenemos todos los médicos entrenados, tenemos la antiviral para atender las demandas de Santa Fe y tenemos también el diagnóstico en la propia provincia”.



-¿El gobierno nacional actuó con ineptitud?

“No podría decirle eso, porque no conocemos los detalles la decisión dentro del gobierno nacional. Lo que le puedo asegurar es que en Santa Fe se ha actuado correctamente; el equipo que tenemos aquí es extraordinario, los doctores (Miguel Ángel) Cappiello, (Débora) Ferrandini, en fin. Es un grupo de gente que tienen formación en epidemiología, que tienen masters hechos en Londres, que han estado en Israel, en Ginebra, han recibido premios de la Organización Panamericana de la Salud. Desde el punto de vista técnico estamos absolutamente seguros de que se está haciendo lo mejor que se conoce hoy”.


-El ministro (de Salud, Juan) Mansur dijo que si se hubieran unificado los criterios otros serían los resultados…

“De todas maneras nosotros estamos en Santa Fe. Acá hay un criterio que se viene desarrollando. Fue lo mismo con el dengue: está el foco de contagio, de dónde vino, cómo llegó, qué ruta siguió. Lo mismo se ha hecho con la epidemia de gripe A, se sabe de dónde llegó al país, de dónde venía, quién fue la persona que lo trajo, hay un estudio epidemiológico muy pormenorizado del recorrido de estas enfermedades”.