De no ser por el claro objetivo de confundir a la opinión pública, intención perversa a la que estamos acostumbrados, las declaraciones del Diputado Alberto Monti no merecerían siquiera ser tomadas en consideración.
Que se atreva a sostener que “gracias a la actitud del PJ” los santafesinos van a pagar menos impuestos es cuanto menos “perverso y falso”. ¿A qué contribuyentes benefician los recortes introducidos por el neoliberalismo a la reforma tributaria en la Legislatura ? En primer lugar, a las grandes empresas, nacionales y multinacionales que seguirán exentas del pago del impuesto a las Ingresos Brutos. En segundo término, a los grandes propietarios de inmuebles, urbanos y rurales, que tienen dividido su patrimonio en enorme cantidad de partidas y que el PJ impide personalizar. Y por último, a los grandes deudores del fisco provincial propiciando una amplia y laxa moratoria a quienes están obligados a pagar sus impuestos hoy, y pueden hacerlo. O sea, el justicialismo defiende a quienes tienen mayor capacidad contributiva y, sistemáticamente, se ven beneficiados en detrimento de quienes menos tienen.
Por otro lado, los santafesinos sabemos perfectamente a quienes perjudica el recorte a los ingresos públicos de la provincia: a todos los que pretendemos una provincia normal, con derechos respetados, con salud, seguridad, educación y justicia para todos; a miles de empleados públicos, docentes, agentes de seguridad y organismos del Estado que reclaman una merecida recomposición salarial; a cientos de miles de santafesinos que requieren agua potable, mejores rutas y caminos, mejores servicios de energía y podríamos seguir enumerando.
La política del “perro del hortelano” que aplican los legisladores justicialistas, todos, desde el supuesto “progresismo” kirchnerista al más rancio neoliberalismo menemista, producto del pánico a no poder recuperar el poder en 2011 (único objetivo que los mueve) hace que pretendan que el actual gobierno no pueda hacer lo que ellos deliberadamente no hicieron en 24 años de gobierno: transformar a Santa Fe en beneficio de las mayorías largamente postergadas. Pretenden que sigamos viviendo en la provincia que ellos nos dejaron, con escuelas y hospitales desmantelados y destruidos, empleados públicos y jubilados con sueldos miserables, media provincia sin agua potable, bolsones de pobreza y marginalidad humillantes, clientelismo indignante en los sectores más vulnerables de la sociedad, con servicios vitales, como la energía, a cargo de una empresa vacía de recursos humanos y materiales (es de buen conductor observar el espejo retrovisor, Senador Spinozzi).
No lo van a lograr. La política de “incendiemos todo para volver” no tendrá acogida en la sociedad. La gente sabe no son más que descalificadores slogans de la oposición neoliberal. Los santafesinos tienen en claro que el gobierno del Frente Progresista pretende cumplir con un programa de gobierno votado por amplia mayoría en dos oportunidades, en el inclaudicable camino de avanzar hacia una sociedad más justa, sin excluidos ni marginados.
Joaquín F.Blanco
Diputado Provincial
F.P.C. y S - PS
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